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Oklahoma City Thunder y su problemática situación

Analizamos el futuro inmediato de la franquicia de Oklahoma


Bendito problema, dirían 25 o más de los 30 equipos de la NBA. Mucho se ha hablado de la acumulación de talento vía Draft que acabó por convertirles en un equipo candidato al anillo, pero el proyecto de Sam Presti da una sensación de estancamiento desde que llegaron a las Finales en 2012 y la posterior salida de Harden. Durante este tiempo se han incrementado las críticas a Scott Brooks, al que se hace responsable de no saber crear opciones ofensivas fuera del talento de Durant y Westbrook. OKC está en ese momento en el que es muy difícil mejorar, siendo ya un candidato claro al anillo, pero sin terminar de culminar. También es verdad que han tenido varias lesiones en momentos muy inoportunos, Westbrook hace dos temporadas, Ibaka los pasados Playoffs y ahora el vigente MVP, Kevin Durant.
El principal fichaje del verano ha sido el especialista en el triple Anthony Morrow, que firmó por 3 temporadas y 10 millones. Sebastian Telfair firmó por un año y el mínimo, y en el Draft eligieron a Mitch McGary en el puesto 21.

El problema de los Thunder es que no tienen mucho margen de maniobra. Tienen tres contratos de volumen con Durant, Westbrook e Ibaka, además de los 8 millones de Perkins, que acaban este año. Pau Gasol habría sido un gran fichaje, pero acabó decidiéndose por los Bulls. Resulta difícil imaginar un traspaso donde acaben consiguiendo algún jugador de calidad sin desprenderse de nadie que les sea valioso. Otro posible cambio sería el del entrenador,que seguramente la gran mayoría de los aficionados haría sin dudar; sin embargo quienes de verdad deciden no parecen interesados en esta opción. La posible agencia libre de Durant en 2016 empieza a exigir una cierta urgencia a la directiva a la hora de intentar algo, aunque en estas situaciones sea muy delicado moverse, puesto que el riesgo de que salga mal y desmontar un equipo potencialmente campeón es muy grande.

A falta de movimientos importantes en el mercado, será fundamental la progresión de los jóvenes talentos y que vayan encontrando su lugar en la rotación, no solo durante la Regular Season sino también en Playoffs, cosa que no ocurrió el año pasado. Jugadores como Jeremy Lamb, Steven Adams y Perry Jones tendrían que dar un paso adelante esta temporada, como hizo la pasada Reggie Jackson, que este año tendrá, como mínimo, que mantenerse al mismo nivel. Nick Collison, el orgullo de la clase obrera, seguirá un año más aportando esfuerzo y minutos de descanso para los hombres interiores.

Su situación es de todos menos dramática, y podrían llevarse el anillo este año perfectamente. Sin embargo no parecen tener mejor plantilla que el año anterior ni el otro, no digamos mientras todavía estaba Harden para liderar la segunda unidad. La progresión de Durant, Westbrook e Ibaka, que han crecido año a año, no parece ser suficiente por sí misma para volver a las Finales. Si tenemos en cuenta los inicios del proyecto y su fulgurante ascenso, estas dos últimas temporadas resultan un poco decepcionantes. Evidentemente esta decepción quedará en el olvido si consiguieran ganar este año, y los Thunder parten por derecho propio en este grupo de 4-5 equipos claramente candidatos a hacerlo. Su situación puede ser problemática si tenemos en cuenta las grandes aspiraciones que tienen, por eso precisamente el problema que hay en Oklahoma es de esa clase que todo el mundo querría tener.


@Kay76ers


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