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Valencia 0-1 Barcelona: ¡In extremis, Busquets!

Victoria agónica del F. C. Barcelona ante un gran Valencia gracias a un solitario gol de Sergio Busquets que le permite no perder comba respecto al Real Madrid



El Barça se lleva los 3 puntos antes de encarar el derby catalán frente al Espanyol de la próxima semana ante un rival que vendió muy cara su derrota. Demasiado castigo para el equipo valencianista, que llegó muy justo físicamente a los instantes finales del partido. Este resultado permite a los de Luis Enrique no descolgarse de un Real Madrid cuyos números asustan.

Prueba de fuego para este nuevo Barça, que se medía a un Valencia que parecía haberse desinflado ligeramente respecto a su gran inicio liguero, en un día en el que la emoción de presenciar un bonito espectáculo no alcanzaba a difuminar el mal sabor de boca presente en todos los aficionados al fútbol después de los acontecimientos de esta mañana en los aledaños del Vicente Calderón.

Liga BBVA-J13

Valencia0
Barcelona1
Ficha técnica
Valencia: Alves, Barragán, Otamendi, Mustafi, Gayá; Fuego, Parejo (Filipe, m.83), Andre Gomes; Feghouli, Rodrigo (De Paul, m.72) y Negredo (Alcacer, m.81).

Barcelona: Bravo, Alves, Piqué, Mathieu (Rakitic, m.67), Alba; Busquets, Mascherano, Xavi (Rafinha, m.79); Messi, Suárez (Pedro, m.79) y Neymar.

Gol: 0-1, m.93; Busquets.

Árbitro: Fernández Borbalán (C. Andaluz). Amonestó por el Valencia a Barragán, Mustafi y Rodrigo, y por el Barcelona a Mathieu, Piqué y Alba.

Incidencias: partido correspondiente a la jornada 13 de la Liga BBVA disputado en el estadio de Mestalla ante 50.000 espectadores. Antes del inicio del partido se leyó un manifiesto de la LFP contra la violencia en el fútbol, tras el fallecimiento hoy en Madrid de un aficionado del Deportivo.
Luis Enrique volvía a sorprender con su planteamiento táctico, colocando a Sergio Busquets y a Mascherano juntos en la zona medular, junto a un Xavi con más libertad, encargado de dar velocidad a la circulación del equipo blaugrana. En un intento de acomodar el equipo a los tres nombres propios de la delantera culé, el técnico asturiano colocaba a Busquets tirado a la derecha en el medio del campo, lugar que suele ocupar Rakitic, lo que permitía a Alves ser más profundo, siempre con la intención de hacer el campo lo más ancho posible, a sabiendas de la tendencia de Luis Suárez de caer hacia la zona central del área. Conocedor de la buena salida a la contra de los valencianistas y del no muy generoso trabajo defensivo de sus hombres de ataque, la idea de perder posesión de balón y claridad en el juego parecía ser un trato justo en cuanto a no irse de vacío de Mestalla.

La primera parte transcurrió sin apenas ocasiones entre dos equipos cuya idea inicial era no encajar para no perder. No obstante, el Valencia pudo ponerse por delante en el minuto 11 de partido, con un potente lanzamiento de Rodrigo desde la banda izquierda, que saca muy bien Claudio Bravo. Sin tiempo para recobrar el aliento, es el Barça el que a punto está de castigar a los valencianistas por medio de Luis Suárez, que recoge dentro del área una dejada de Neymar a pase de Piqué, pero su lanzamiento es despejado por Diego Alves. No acaba de afinarse el delantero uruguayo, cuyos gestos expresaban una cierta desesperación de quien no consigue reconciliarse con las sensaciones que necesita un jugador tan dependiente del gol. El que sí parece haberse adaptado a la perfección es André Gomes. La figura del centrocampista portugués emergió en los instantes finales del primer período, primero con un lanzamiento desde la frontal del área que se va rozando el palo derecho de la portería blaugrana y, después, en una salida al contragolpe en la que consigue driblar a Bravo, pero su lanzamiento se va fuera por muy poco.

Al Valencia parecía funcionarle la propuesta de dos líneas muy juntas, con constantes ayudas defensivas, y transiciones rápidas en las que Negredo era la primera pieza aguantando el balón y jugando realmente bien de espaldas.

El partido parecía pedir un cambio de tendencia, de mentalidad. Así, fue el Valencia el que salió del vestuario con más ambición y el que dispuso de las primeras ocasiones por medio de Negredo, cuya precisión en el remate no llegaba a estar a la altura de la ayuda que ofrecía al equipo en todo lo demás. Pero, como en los mejores combates, la réplica del Barça llegó al poco tiempo por medio de Luis Suárez, que se hace anticipa a Diego Alves en un rechace dentro del área, pero peca de individualismo, rematando fuera en posición desiquilibrada con la portería vacía y con un Messi que no acababa de explicarse la mala decisión tomada por el uruguayo. Luis Enrique dio entonces entrada en el campo a Rakitic, recomponiendo las líneas y relegando a Mascherano al centro de la defensa, para intentar manejar el partido y contrarrestar el empuje con el que había salido el conjunto ché.

No obstante, eran los valencianistas los más decididos a ir a por el encuentro, y los que dispusieron de las ocasiones más claras por medio de Rodrigo y Feghouli, que sacan Piqué bajo palos y Claudio Bravo, respectivamente. Con el partido mucho más abierto, Negredo a punto está de nuevo de adelantar al Valencia, pero el guardameta blaugrana parecía haber escogido el mejor momento para demostrar el porqué de su presencia en la titularidad por delante de Ter Stegen y Masip. Prólogo la ocasión del delantero madrileño a los últimos minutos en los que la tensión y el miedo a fallar se apoderaban drásticamente de la situación.

Cuando parecía que el partido iba a terminar en tablas, el Barça encadena una serie de córners sucesivamente despejados por la zaga valencianista, hasta que, en uno de ellos, el balón le llega a Messi en la parte derecha del área. Como quien se sabe con el derecho de ralentizar el tiempo cuando todo transcurre de forma vertiginosa, el argentino levanta la cabeza, le sirve un centro perfecto al segundo palo a Neymar, que remata a bocajarro dentro del área pequeña. Ya se cantaba el gol en el banquillo del Barça cuando Diego Alves logra despejar el remate del brasileño, pero no así el rechace de Busquets, que ponía por delante al conjunto blaugrana y dejaba totalmente noqueado al conjunto valencianista, sin tiempo ni para buscar una explicación a cómo el F. C. Barcelona le había quitado en el último segundo un punto, contrastando con oportunismo un punto débil y dibujando en los acontecimientos un nombre y una forma que, seguramente, nadie esperase al inicio del encuentro.

Sin tiempo para más, el Barça reencuentra sensaciones justo a tiempo para no descolgarse respecto al Real Madrid en una liga que va acortando pretendientes.


@ivandsanda


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