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Un increíble Wall acaba con unos irregulares Wolves (112-105)

Los Wolves consiguieron empatar en la recta final pero unas malas decisiones y un Wall determinante e inspirado fueron claves para la victoria de los WIzards



Los Wolves no cambian los malos hábitos por año nuevo y volvieron a caer en los últimos momentos del partido como ocurría ante los 76ers. Por su parte, los de Washington controlaron siempre el partido y se sintieron muy superiores ante los visitantes.

El primer cuarto fue bastante igualado, con unos WIzards basándose en los chispazos de Beal y Wall y unos Wolves que mediante Towns y Wiggins se mantenían en la lucha. Exceptuando algunas rachas anotadoras de los locales con las que conseguían parciales de 7-0 y 6-0 respectivamente, el primer cuarto se fue igualando hasta llegar al final de este con un 32-29 en el electrónico.

El segundo cuarto fue el resumen perfecto del partido, unos flojos Wolves con la inspiración de Wiggins y unos WIzards controladores y con mucha facilidad para anotar, tanto en el juego interior como en el exterior. A pesar de no realizar un gran segundo cuarto, Minnesota consiguió ponerse por delante aunque por poco tiempo. Cuando los de Thibodeau ganaban de tres, un parcial de 9-0 les devolvía a la realidad y tras una serie de canastas se llegaba al descanso con ocho puntos de ventaja para los locales, 56-48.

Pero todo cambiaría en el tercer cuarto, ya que se presentó la mejor versión de los Wolves, ya que a la seguridad defensiva se le sumaba una inspiración a la hora de anotar. Por su parte, los Wizards siguieron bastante correctos en la faceta anotadora pero se vieron incapaces de parar el ataque de los visitantes. El parcial final del cuarto fue 24-37, trece puntos de ventaja para Minnesota con los que no solo conseguían eliminar la ventaja cosechada por los locales en el segundo cuarto, sino que también les servían para situarles cinco puntos por encima en el marcador (80-85).


El último cuarto comenzó con unos Wizards arrolladores que anulaban el parcial de los Wolves mediante un parcial de 9-0. A partir de ahí comenzó un mini-partido en el que las parejas Towns-Wiggins y Beal-Wall se encargaban cada una de conseguir las canastas de sus equipos. Se llegó con un empate a 101 a falta de tres minutos y ahí apareció la clave del partido, un brillante Wall. Primero con cuatro puntos seguidos combinando calidad y certeza ante unos flojos LaVine y Ricky Rubio, y más tarde asistiendo a sus compañeros para acabar por sentenciar el partido.

En los Wizards destacan Wall con un doble-doble (18 p, 18 asist), Beal con 22 puntos y Gortat con otro doble-doble de 19 puntos y 10 rebotes.

En los Wolves destacan Wiggins con 41 puntos, Towns con un doble-doble (18 p, 10 reb) y Dieng con otro doble-doble de 15 puntos y 11 rebotes.


@DiegodelMoral


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