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Las superestrellas del Oeste se disputan una dramática carrera por el MVP

Se acerca el tramo final de la temporada y crece la incertidumbre por conocer quién será nombrado como mejor jugador, en una fase regular que brindó múltiples actuaciones memorables de los candidatos en disputa


En una temporada regular que se acerca a su definición, una gran cantidad de jugadores tuvieron momentos extraordinarios que pasarán a la historia. Sin embargo, sólo un pequeño grupo ha sido tan consistente e impresionante para mantenerse en la pelea por el máximo premio individual. En ese selecta lista de excelentes jugadores se encuentran protagonistas principales en sus equipos y esenciales a la hora de sumar triunfos. El premio será para uno solo, aunque firme candidatos sobran.
En una temporada regular que se acerca a su definición, una gran cantidad de jugadores tuvieron momentos extraordinarios que pasarán a la historia. Sin embargo, sólo un pequeño grupo ha sido tan consistente e impresionante para mantenerse en la pelea por el máximo premio individual. En ese selecta lista de excelentes jugadores se encuentran protagonistas principales en sus equipos y esenciales a la hora de sumar triunfos. El premio será para uno solo, aunque firmes candidatos sobran.

5- Isaiah Thomas es uno de esos jugadores que ha dado un salto de calidad impactante para meterse de lleno en la conversación. Promedia 29.4 puntos y 6.1 asistencias por juego, siendo ésta, lejos, la anotación la más alta de su carrera. Thomas ha guiado a un equipo de Boston que demostró carácter ante los grandes y logró posicionar a su equipo en las primeras posiciones desplegando un nivel individual poco antes visto para un jugador de su estatura. El base se convirtió en el motivo principal del éxito de los Celtics y rompió todos los pronósticos que estaban previstos para pasar de ser el último pick del draft a convertirse en la pieza primordial de la franquicia más ganadora. Luego de años irregulares en Sacramento y Phoenix, Thomas devolvió a los Celtics al lugar donde marca su historia, siendo -además- uno de los mejores y más desequilibrantes jugadores de la temporada.

4- LeBron James se acostumbró a integrar esta prestigiosa lista año tras año. No existe otro jugador tan consistente y productivo. El tiempo parece que no pasa para el estelar emblema de Cleveland quien, en su 14º temporada, promedia 26 puntos, 8.8 rebotes y 8.2 asistencias por juego. James ya se adjudicó el máximo premio individual en cuatro oportunidades, por lo que sus prioridades están en metas mayores a nivel colectivo. La estrella de los Cavs domina cada aspecto del juego con total comodidad y cumple su rol de líder, integrando a cada compañero en el partido para que su equipo disponga de más armas ofensivas que el rival. James ha tenido el talento todos estos años de mantener su prestigioso nivel, mientras hace mejor a sus compañeros para el beneficio propio y de su equipo. Cleveland ha añadido profundidad a su plantel para contar con jugadores experimentados en los playoffs y ningún otro equipo parece ser una seria amenaza a robarles el trono en el Este por lo que, en el tramo final de la temporada, el protagonismo de LeBron debería bajar para guardar energías de cara a las instancias decisivas.

3- La temporada de James Harden es uno de los puntos fuertes de la actual campaña. La magistral decisión de Mike D´Antoni de darle las llaves del equipo potenciaron aún más sus habilidades para colocarlo como uno de los jugadores más dominantes de la liga. Harden promedia 29.1 puntos, 7.9 rebotes y lidera la NBA con 11.2 asistencias en una serie regular en la que lleva, hasta el día de la fecha, 15 triples decenas, superando las marcas previas individuales en otras temporadas y entrando en los libros más prestigiosos de la historia de los Houston Rockets. La ofensiva del conjunto texano -encabezada por una extensa cantidad de tiradores- ha sido magistralmente orquestada por Harden, el líder capaz de encargarse de múltiples tareas para hacer funcionar a un equipo de Houston que amenaza con ser uno de los equipos más temibles en los playoffs. En la lucha por coronarse como el mejor jugador de la temporada, Harden quedó en segundo lugar en 2015 cuando Stephen Curry fue premiado, pero desde entonces ha dado un notable salto de calidad que lo colocará indudablemente en el podio final, manteniéndose como uno de los mejores jugadores de los últimos años.

2- Kawhi Leonard suele volar bajo el radar, pero en el último encuentro ante Harden y los Rockets fue el protagonista principal para cerrar ese partido de la manera más épica, demostrando su valor, esfuerzo, dedicación y talento en ambos costados. Y precisamente ese reconocimiento es lo que lo hace distinto a la estrella de los Spurs. Su incondicional aporte defensivo eclipsa al de cualquiera de las superestrellas con las que se lo compare. Leonard es una garantía en cualquier lado de la cancha y uno de los jugadores más completos del mundo. Su evolución, año tras año, ha sido -silenciosamente- tan constante que ha llegado a perfeccionar varios aspectos del juego apenas teniendo 25 años. Leonard aún tiene mucha carrera por delante y el cielo parece ser el límite para el emblema de los Spurs que tomó la iniciativa tras la partida de Tim Duncan. En la actual campaña, promedia 26.3 puntos y 6 rebotes por encuentro, pero lo que lo diferencia del resto es su lectura del juego, inteligencia y control que le permiten recuperar balones y tomar las decisiones correctas en los momentos más importantes.

1- El mundo de la NBA es gobernado por las estadísticas. Y la más llamativa de ellas, a nivel individual, es la triple decena, un dato que deja en claro lo dominante que ha sido ese jugador en un partido. El líder de este rubro es, nada más y nada menos, que Russell Westbrook, quien se perfila a promediar durante una temporada entera una triple decena, lo que sería un logro casi inédito ya que sólo fue conquistado una vez en la historia de la liga. Con la polémica partida de Kevin Durant, la explosividad de Westbrook dio un salto de calidad impactante. Tal es así que el base de Oklahoma promedia 32.1 puntos, 10.5 rebotes y 10 asistencias por encuentro y ya se ubica en el podio de los jugadores que más triples decenas han logrado en una sola temporada. Oklahoma estaría en el fondo de las posiciones si no fuera por Westbrook. La superestrella del Thunder potenció a sus compañeros, involucrándolos más en el costado ofensivo, disimulando la ausencia de Durant. Con un promedio de casi una triple decena cada dos partidos, demuestra toda su ferocidad cada noche, siendo el atleta más energético y pasional de la liga. Aunque Oklahoma perdió a uno de los mejores jugadores, Westbrook tomó las riendas de su equipo con total comodidad y lealtad, superando el desafío de mantener competitivo al Thunder tras la pérdida de un jugador emblemático.

Algunos compartirán esta decisión y otros la criticarán, teniendo sólidos argumentos para opinar lo contrario. Porque semana a semana los mejores del mundo se superan entre sí y toman mayor protagonismo y todos son grandes jugadores. Entrando al último tramo de la temporada, aún queda mucho para definirse. Los récords de los equipos de los protagonistas en disputa por el máximo premio individual jugarán un rol determinante, tal y como lo hará la suerte de cada uno en los playoffs. El MVP de esta temporada es Russell Westbrook. Simplemente porque hace honor al significado de este premio. Es el jugador más valioso para su equipo. Sin él, todo estaría perdido en Oklahoma. En cambio, en los otros casos, cada jugador cuenta con una mayor predisposición de talento a su alrededor. Y ninguno tuvo que cubrir la ausencia inesperada de un compañero tan necesario para el éxito de la franquicia. Ninguno tuvo que asumir tanta responsabilidad y elevar su juego hacia un nivel inimaginable para mantenerse en competencia frente a los mejores equipos. Sin embargo, el peor enemigo de Westbrook quizás sea él mismo. A una velocidad supersónica, factores claves como las pérdidas y la efectividad de campo suelen jugarle en contra, pero aún así ha producido números extraordinarios para gobernar la liga en distintos rubros. De todas formas, es cierto que ninguna vez el equipo de un jugador más valioso ha salido de los primeros puestos y actualmente Oklahoma no forma parte ni siquiera de los cuatro primeros en la Conferencia del Oeste; pero también es cierto que hasta la temporada pasada, ningún jugador había sido elegido como MVP de manera unánime hasta que Stephen Curry arrasó en las votaciones. Los récords están para romperse. La temporada de Westbrook, si finalmente logra promediar una triple decena, merecerá ser premiada. De lo contrario sería una falta de respeto hacia una superestrella que se está adjudicando una estadística solamente lograda una vez en la historia. Pero nada está garantizado en la NBA. Westbrook tendrá nuevamente que producir sus números y, más importante aún, lograr victorias en los momentos determinantes de este cierre de temporada en los partidos claves ante rivales directos. Lo que sí está garantizado es un apasionante final para una fase regular que ha visto quebrarse varios récords y unos playoffs que prometen ser de alto vuelo.


@Joacocarrascal


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