Alavs Athletic Atltico Alavs Betis Celta Eibar Espanyol Getafe Granada Leganés Levante Mallorca Osasuna Real Madrid Real Sociedad Sevilla FC Valencia Real Valladolid Villarreal

Real Valladolid 0-1 FC Barcelona: El Barça gana pidiendo la hora

Un gol de Arturo Vidal le da los tres puntos al Barça que acabó encerrado en su propio campo

Foto: FC Barcelona

LaLiga Santander-Jornada 36

Valladolid0
Barcelona1
Ficha técnica
Real Valladolid: Masip; Moyano, Kiko Olivas, Joaquín (Hervías, 46'), Javi Sánchez, Raúl García (Nacho, 25'); San Emeterio, Alcaraz (Ünal, 46'), Kike Pérez; Guardiola (Sandro, 61'), Óscar Plano (Waldo, 80').

Barcelona: Ter Stegen; Semedo, Piqué, Lenglet (Araujo, 57'), Jordi Alba; Busquets (Junior Firpo, 74'), Sergi Roberto, Riqui Puig (Rakitic, 57'), Vidal; Messi, Griezmann (Luis Suárez, 46').

Goles: 0-1 Vidal (15').

Árbitro: Antonio Miguel Mateu Lahoz (comité valenciano). Amonestó a Lenglet (40'), Alcaraz (45'), Kike Pérez (65'), Jordi Alba (78').

Incidencias: Estadio José Zorrilla.
Este FC Barcelona encaja perfectamente en el concepto de bipolaridad. Es un equipo capaz de lo mejor y lo peor en el mismo partido. Tras una primer tiempo que despertó algún atisbo de esperanza para seguir creciendo y ganar buenas sensaciones, el equipo se cayó tras pasar por vestuarios. Se volvió a ver el equipo lento, previsible y plano que parecía haber quedado atrás. Sin embargo, le valió el tanto de Vidal para llevarse los tres puntos y seguir peleando por el título de Liga. 

Setién le devolvió la titularidad a Riqui Puig tres partidos después. El de Matedepera acompañó a Busquets y Vidal en un teórico 4-4-2 en rombo que se fue modificando durante el transcurso del encuentro. Suárez esperaba en el banquillo y era Griezmann quién acompañaba a Messi en la delantera. Sergio quiso repetir el esquema de Setién pero el plan no le salió bien durante los primeros 45 minutos. Porque el Barça salió intenso en busca de un gol tempranero. No llegó el tanto hasta el minuto 15 cuando Vidal, tras levantarse rápidamente del suelo, recibió un pase de Messi y cruzó el balón con potencia. Tanta que repelió el poste y besó la red. 

El cuadro azulgrana se gustaba en el José Zorrilla: Riqui Puig dando velocidad al juego, Busquets barriendo cualquier intento de contraataque pucelano y Semedo percutiendo constantemente por el costado derecho. El Barça se ordenaba en el 3-5-2 de los primeros partidos de Setién, cosa que provocó que el portugués se pudiera proyectar en ataque con frecuencia teniendo a Sergi Roberto cubriéndole las espaldas. Griezmann pudo hacer el segundo pero no logró conectar con el balón.  

El Valladolid fue creciendo e iba acercándose a la meta de Ter Stegen. Kike pudo poner el empate pero trastabilló cuando el gol parecía cantado. Pero el Barça se apagó en la segunda mitad. Como si alguien hubiera tocado un interruptor y  el contador de energía de los futbolistas culés se hubiese vaciado por completo. Los cambios no fueron acertados. Suárez y Rakitic salieron por Griezmann y Riqui y el centro del campo desapareció. Se vio un equipo cansado, fatigado, previsible y envejecido, incapaz de conservar el cuero. Setién cambió el esquema pero no conseguía revertir la dinámica. Con un once donde la mayoría de sus integrantes superan la treintena, se antoja imposible mantener un nivel de intensidad adecuado para tener el control de los partidos durante los noventa minutos. 

Era un equipo totalmente opuesto al elenco vistoso, atrevido y enérgico del primer tiempo. Los jugadores azulgranas, con el corazón en la boca, miraban como Ter Stegen sacaba dos cabezazos a Ünal.  Setién cuenta con un portero que da puntos y con un Piqué imperial que cortó todo balón que venía por alto. El central catalán mantuvo una discusión acalorada en el "cooling break" con Mateu Lahoz por un posible penalti que el trencilla no señaló. Igual que Suárez, cuya protesta fue su acción más destacada del partido.

Los de Sergio buscaban el gol del empate con ahínco ante un Barça replegado que acabó pidiendo la hora para seguir a la estela del Real Madrid. LaLiga parece imposible, pero con un nivel de juego como el de hoy, alzarse con la Champions parece una utopía.

Con la tecnología de Blogger.