Aston Villa 0-3 Arsenal: Özil y Welbeck, dupla letal
Los dos futbolistas del conjunto gunner se convirtieron en la pesadilla del Aston Villa, que se mantiene en puestos de Liga de Campeones, con tan solo un punto de diferencia respecto a su reciente rival
Tres minutos le bastaron al Arsenal para finiquitar el partido, en un duelo clave por auparse a los primeros puestos de la tabla. El equipo de Paul Lambert, sólido otros días, dejó escapar los puntos por la falta de concentración en uno de los momentos más importantes del encuentro. Hasta la primera media hora el balón había sido para los hombres de Wenger, que buscaban la manera de encontrar resquicios en la defensa rival. En cualquier caso, ambos clubes tuvieron sus oportunidades para adelantarse en el marcador. La más clara la tuvo el equipo local, por medio de un cabezazo de Clark a un metro de la línea de gol. Szczesny obró el milagro en el Villa Park.
El Arsenal dominaba el partido, pero no hacía pasar demasiados apuros a ‘los villanos’. Fue entonces cuando aparecieron Welbeck y Özil para revolucionar el duelo. Ni mucho menos se les esperaba, pero ellos solos acabaron con las dudas del aficionado gunner. Primero fue el internacional inglés el que sirvió un balón de lujo al centrocampista, que frío como de costumbre definió a la perfección ante la salida de Guzan. Solo dos minutos después fue el alemán el que asistió a su compañero. Su centro desde la banda izquierda se encontró con las botas del exariete del United, que no perdonó tampoco.
Con el Aston Villa todavía en estado de shock llegaría el tercer y último gol, esta vez obra de un propio jugador del equipo local, al compás de la desgraciada situación que se estaba viviendo en el estadio. En apenas 180 segundos los de Lambert decían adiós a sus opciones.
La segunda parte no pudo levantar a un equipo abatido y que no fue capaz de imponerse en el centro del campo. El Arsenal siguió controlando el balón y el ritmo del partido, sabedor de que los tres puntos ya no se podían escapar. Los de Wenger dejaron correr el reloj hasta que el árbitro pitó el final del encuentro. Fin de la historia en un partido que solo la tuvo durante tres minutos de infarto.
@pablogdg
Premier League-J5
| Aston Villa | 0 |
|---|---|
| Arsenal | 3 |
Ficha técnica
|
|---|
| Aston Villa: Guzan, Hutton, Clark, Senderos, Cissokho, Cleverley, Sánchez (Bacuna 86’), Delph, Weimann (Grealish 46’), Richardson (N’Zogbia 77’) y Agbonlahor. Arsenal: Szczesny, Chambers, Mertesacker, Koscielny, Gibbs, Arteta, Oxlade-Chamberlain (Rocicky 78’), Ramsey, Cazorla, Özil y Welbeck (Wilshere 78’). Goles: Özil (min. 33), Welbeck (min. 34), Cissokho, en propia puerta (min. 36). Árbitro: Mike Jones. Amonestó a Chambers (min. 23), Ramsey (min. 56) Clark (min. 83) y Wilshere (min. 84). Incidencias: Quinta jornada de la Premier League. Estadio Villa Park (40.013 espectadores). |
El Arsenal dominaba el partido, pero no hacía pasar demasiados apuros a ‘los villanos’. Fue entonces cuando aparecieron Welbeck y Özil para revolucionar el duelo. Ni mucho menos se les esperaba, pero ellos solos acabaron con las dudas del aficionado gunner. Primero fue el internacional inglés el que sirvió un balón de lujo al centrocampista, que frío como de costumbre definió a la perfección ante la salida de Guzan. Solo dos minutos después fue el alemán el que asistió a su compañero. Su centro desde la banda izquierda se encontró con las botas del exariete del United, que no perdonó tampoco.
Con el Aston Villa todavía en estado de shock llegaría el tercer y último gol, esta vez obra de un propio jugador del equipo local, al compás de la desgraciada situación que se estaba viviendo en el estadio. En apenas 180 segundos los de Lambert decían adiós a sus opciones.
La segunda parte no pudo levantar a un equipo abatido y que no fue capaz de imponerse en el centro del campo. El Arsenal siguió controlando el balón y el ritmo del partido, sabedor de que los tres puntos ya no se podían escapar. Los de Wenger dejaron correr el reloj hasta que el árbitro pitó el final del encuentro. Fin de la historia en un partido que solo la tuvo durante tres minutos de infarto.
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