Atlanta Hawks y el lugar donde nadie quiere estar
Analizamos el futuro inmediato de la franquicia de Georgia
Los Hawks llevan siete años seguidos jugando Playoffs, aunque en las tres últimas ocasiones hayan sido eliminados en primera ronda. El núcleo formado principalmente por Joe Johnson y Josh Smith hace tiempo que dejó el equipo, pero la figura de Al Horford, la progresión de Teague, un correcto grupo de jugadores y, porque no decirlo, el escaso nivel de la Conferencia Este estos últimos años, les han seguido clasificando para la fase final. Los Atlanta Hawks también han sido protagonistas recientemente por un caso de racismo, que provocó la salida de su propietario. Actualmente la franquicia está a la espera de encontrar un comprador, para lo que ya existe una serie de candidatos.
Hemos comentado en otras ocasiones como en la NBA el lugar en el que menos interesa estar es en el medio, sin posibilidad real de competir por el título ni el margen de maniobra suficiente para formar una plantilla aspirante. Los Hawks se encuentran justamente en esa situación. Cuando hace ya 7-8 años los halcones volvieron a aparecer por los puestos altos de la Conferencia todos los aficionados se alegraron por ello, pero después de varias temporadas sin ser capaces de dar el siguiente paso, y con estas últimas ya en línea descendente, su presente y futuro se presentan como mínimo poco esperanzadores. El buen hacer de la plantilla para sobreponerse a la ausencia por lesión de Horford y una gran gestión de un técnico debutante como Mike Budenholzer les permitió clasificarse para Playoffs la temporada pasada, pero teniendo en cuenta que el nivel medio del Este ha subido no parece del todo claro que este año vaya a ocurrir lo mismo.
No ha sido un verano especialmente movido para el equipo de Atlanta. En el Draft eligieron a Adreian Payne con el pick 15 y a Walter Tavares, que de momento seguirá jugando en el Gran Canaria en la liga ACB, en el puesto 43. Como agentes libres incorporaron al suizo Thabo Sefolosha, Kent Bazemore, y al debutante Jarell Eddie por el mínimo. Renovaron al veterano Elton Brand, a Shelvin Mack y a Mike Scott. El mejor fichaje del equipo de Atlanta es Al Horford, que volverá recuperado de su lesión. Se unirá al año pasado All Star Paul Millsap, al base Jeff Teague y al jugador que marcó el récord histórico de partidos consecutivos anotando triples el año pasado, Kyle Kover.
La plantilla es de calidad y tiene bastante profundidad, con jugadores que pese a no ser especialmente mediáticos ofrecen buen rendimiento, como DeMarre Carrol o Pero Antic. La pareja interior formada por Horford y Millsap es muy potente además de versátil, y Jeff Teague mostró buenos progresos el año pasado, demostrando que puede ser un gran base. Pero al equipo le sigue faltando ese jugador diferencial, que sea capaz sobretodo de anotar con consistencia. Resulta fácil pronosticar que serán un equipo duro de batir y estarán en la lucha por entrar en Playoffs, pero no resulta especialmente ilusionante después de su trayectoria reciente. Tampoco pensando a largo plazo parecen claros sus objetivos, tendremos que ver si continúan en esta tierra de nadie, dan un salto de calidad o empiezan una reconstrucción desde los cimientos para poder pelear efectivamente por el título. De momento, a pesar de ser un equipo serio y con buenos jugadores, están donde nadie quiere estar.
@Kay76ers

Hemos comentado en otras ocasiones como en la NBA el lugar en el que menos interesa estar es en el medio, sin posibilidad real de competir por el título ni el margen de maniobra suficiente para formar una plantilla aspirante. Los Hawks se encuentran justamente en esa situación. Cuando hace ya 7-8 años los halcones volvieron a aparecer por los puestos altos de la Conferencia todos los aficionados se alegraron por ello, pero después de varias temporadas sin ser capaces de dar el siguiente paso, y con estas últimas ya en línea descendente, su presente y futuro se presentan como mínimo poco esperanzadores. El buen hacer de la plantilla para sobreponerse a la ausencia por lesión de Horford y una gran gestión de un técnico debutante como Mike Budenholzer les permitió clasificarse para Playoffs la temporada pasada, pero teniendo en cuenta que el nivel medio del Este ha subido no parece del todo claro que este año vaya a ocurrir lo mismo.
No ha sido un verano especialmente movido para el equipo de Atlanta. En el Draft eligieron a Adreian Payne con el pick 15 y a Walter Tavares, que de momento seguirá jugando en el Gran Canaria en la liga ACB, en el puesto 43. Como agentes libres incorporaron al suizo Thabo Sefolosha, Kent Bazemore, y al debutante Jarell Eddie por el mínimo. Renovaron al veterano Elton Brand, a Shelvin Mack y a Mike Scott. El mejor fichaje del equipo de Atlanta es Al Horford, que volverá recuperado de su lesión. Se unirá al año pasado All Star Paul Millsap, al base Jeff Teague y al jugador que marcó el récord histórico de partidos consecutivos anotando triples el año pasado, Kyle Kover.
La plantilla es de calidad y tiene bastante profundidad, con jugadores que pese a no ser especialmente mediáticos ofrecen buen rendimiento, como DeMarre Carrol o Pero Antic. La pareja interior formada por Horford y Millsap es muy potente además de versátil, y Jeff Teague mostró buenos progresos el año pasado, demostrando que puede ser un gran base. Pero al equipo le sigue faltando ese jugador diferencial, que sea capaz sobretodo de anotar con consistencia. Resulta fácil pronosticar que serán un equipo duro de batir y estarán en la lucha por entrar en Playoffs, pero no resulta especialmente ilusionante después de su trayectoria reciente. Tampoco pensando a largo plazo parecen claros sus objetivos, tendremos que ver si continúan en esta tierra de nadie, dan un salto de calidad o empiezan una reconstrucción desde los cimientos para poder pelear efectivamente por el título. De momento, a pesar de ser un equipo serio y con buenos jugadores, están donde nadie quiere estar.
@Kay76ers