Villarreal 1-1 Levante: Negro y blanco
Pedraza rescata un punto gracias a un gol en el 92'
Los padres, madres, abuelos y abuelas de los niƱos que hoy, esperaban con el ansia enfervorizada de la niƱez, el partido entre Villareal y Levante, recordaban aquellos tiempos en que ambos clubes luchaban por no descender en Segunda o Segunda B. El recuerdo del pasado, siempre presente en la cabeza de los fieles seguidores, se fue desvaneciendo al paso de los minutos al ver la nueva realidad, la de dos equipos de primera luchando de tĆŗ a tĆŗ, por objetivos (dependiendo del aƱo) mayores.
Y fue de ''Negro y Blanco'' el partido, no al revĆ©s porquĆ© del pasado solo quedan viejos recuerdos alegres y tristes que siempre es importante tener en la memoria. De negro porque como en el Yin Yang, toda parte negativa, tiene su punto blanco, en el del Villareal fue el juego, el espĆritu, las ganas y en el del Levante, el talento, la dedicaciĆ³n y la confianza. Ambos mostraron aquello que tenĆan que mostrar, su arsenal de armas para ganar, los groguets, sumidos en el negro que supone verse tan cerca de un descenso que, a pesar de ya ser considerado grande, le sigue persiguiendo y en el Levante, con el miedo a que el mĆ©todo falle, a romper la dinĆ”mica positiva y volver abajo, al lugar que ahora ocupa el Villareal.
El partido termino uno a uno, y fue asĆ porque el punto negro del blanco amarillo fue la mala fortuna y tener en frente a unos CampaƱa y Morales en estado de gracia que hubieran conseguido el gol si no fuera porque Funes Mori les ayudo en un esfuerzo por cortar el balĆ³n.
Pero fue el Levante el que se dio una dosis de madurez en la segunda mitad. Sumido a una avalancha de oportunidades de los locales, intentĆ³ hasta el Ćŗltimo minuto ser fiel a su estilo y buscar el segundo gol, y pecĆ³, de aquello que en la memoria de los abuelos, madres, abuelas y padres no habĆa pecado nunca el club. El equipo, dĆ©bil en defensa durante todo el aƱo, naufragĆ³ al final, por un gol de Pedraza en el 92 cuando lo importante es conservar el botĆn, por avaricia. JĆ©mez dirĆa que hay seguir siempre el estilo, y quizĆ” sea cierto, pero ambos clubes deberĆan aprender a adaptarse a las circunstancias. EstĆ© fue un partido de aprendizaje mayor.
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Foto: Villarreal CF |
LaLiga Santander-Jornada 12
Villarreal | 1 |
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Levante | 1 |
Ficha tƩcnica
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Villarreal: Asenjo, Llambrich, Ćlvaro, Funes Mori, Jaume Costa (Sandone, m.81), Trigueros (Pedraza, m.76), CĆ”seres, Chukwueze, Fornals, Gerard (Cazorla, m.65) y Ekambi.
Levante: Oier, Jason, RĆ³ber Pier, Postigo, Chema, ToƱo, CampaƱa (Doukure, m.85), Rochina (Prcic, m.72), Bardhi, Morales y Roger (Borja Mayoral, m.60). Goles: 0-1, m.77: Funes Mori, en propia puerta. 1-1, m.93: Pedraza. Ćrbitro: Del Cerro Grande (Colegio madrileƱo). MostrĆ³ tarjeta amarilla a los locales a Jaume Costa, CĆ”seres y Ćlvaro, y a los levantinistas Rochina, Bardhi y Jason. Incidencias: partido de la undĆ©cima jornada de LaLiga Santander disputado en el estadio de La CerĆ”mica ante 16.499 espectadores. |
Y fue de ''Negro y Blanco'' el partido, no al revĆ©s porquĆ© del pasado solo quedan viejos recuerdos alegres y tristes que siempre es importante tener en la memoria. De negro porque como en el Yin Yang, toda parte negativa, tiene su punto blanco, en el del Villareal fue el juego, el espĆritu, las ganas y en el del Levante, el talento, la dedicaciĆ³n y la confianza. Ambos mostraron aquello que tenĆan que mostrar, su arsenal de armas para ganar, los groguets, sumidos en el negro que supone verse tan cerca de un descenso que, a pesar de ya ser considerado grande, le sigue persiguiendo y en el Levante, con el miedo a que el mĆ©todo falle, a romper la dinĆ”mica positiva y volver abajo, al lugar que ahora ocupa el Villareal.
El partido termino uno a uno, y fue asĆ porque el punto negro del blanco amarillo fue la mala fortuna y tener en frente a unos CampaƱa y Morales en estado de gracia que hubieran conseguido el gol si no fuera porque Funes Mori les ayudo en un esfuerzo por cortar el balĆ³n.
Pero fue el Levante el que se dio una dosis de madurez en la segunda mitad. Sumido a una avalancha de oportunidades de los locales, intentĆ³ hasta el Ćŗltimo minuto ser fiel a su estilo y buscar el segundo gol, y pecĆ³, de aquello que en la memoria de los abuelos, madres, abuelas y padres no habĆa pecado nunca el club. El equipo, dĆ©bil en defensa durante todo el aƱo, naufragĆ³ al final, por un gol de Pedraza en el 92 cuando lo importante es conservar el botĆn, por avaricia. JĆ©mez dirĆa que hay seguir siempre el estilo, y quizĆ” sea cierto, pero ambos clubes deberĆan aprender a adaptarse a las circunstancias. EstĆ© fue un partido de aprendizaje mayor.
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