Valencia 0-0 Espanyol: calibrando la brújula del gol
El Valencia no es capaz de ganar ante un Espanyol que empezó dominando, pero terminó encerrado
Si por una cosa destaca esta temporada de la Liga Santander es por la igualdad imperante entre sus participantes. Igualdad que hoy ha vuelto a ser la estrella del resultado en el partido disputado en Mestalla entre Valencia y Espanyol en la vigésimocuarta jornada de la liga.
Los periquitos iniciaron el partido con la voluntad de recuperar ese Espanyol de las primeras jornadas: Marc Roca, incrustado entre centrales, ayudó a mantener la posesión y progresar en el campo, gracias a un Darder excelso en el control y a los retazos de calidad de Óscar Melendo. Sin embargo, la posesión periquita resultó ser estéril, pues no logró conectar con Borja Iglesias y Wu Lei, voluntariosos, pero frenados por una sólida línea defensiva che.
Los locales, en cambio, sin gozar de tanto balón amenazaron mucho más la portería defendida por Diego López. La primera la tuvieron en el 28, cuando Gameiro recibió un pase en profundidad de Ferran y, cual escopeta cargada, disparó un balazo que hizo tambalear al poste.
Y es que el Espanyol adoleció de lo que lleva sufriendo toda la temporada: sus transiciones defensivas conceden demasiados espacios a sus rivales. Algo que aprovechó el Valencia que, capitaneado por Dani Parejo, recargó las bandas a través de Gayá y Ferran ante los laterales periquitos, que sufrieron considerablemente.
El resultado se mantuvo invariable durante todo el partido, pero no podemos decir lo mismo del juego visto durante las dos partes. A diferencia de la primera mitad, donde vimos un Espanyol que quería mandar a través del balón, tras el descanso los de Marcelino cogieron el toro por los cuernos y poco a poco fueron ganando terreno a los blanquiazules, hasta convertirlo en un monopolio che.
Lo que en las primera parte eran contraataques tras las pérdidas periquitas, en la segunda se transformó en rápidos y constantes ataques lanzados por las bandas. Múltiples fueron las ocasiones del Valencia para marcar: Parejo estuvo a punto de hacerlo en el 62, y lo habría conseguido si no hubiese sido por un Diego López atentísimo; más tarde lo intentó Gameiro, con una chilena, y Roncaglia, de cabeza tras una falta favorable.
Viendo el panorama, Rubi renunció a la posesión (y prácticamente a la victoria), retirando a Darder y Wu Lei para dar entrada a Puado y Alfa Semedo. Fue el guineano el que más presencia tuvo en el campo, aportando oxígeno y lanzando más de un contraataque. Uno de estos terminaría en el único chute a puerta del Espanyol, realizado precisamente por Puado, que despejó Neto con una gran estirada.
Los minutos pasaban y la ofensiva valencianista seguía su curso, pero sin acierto. La entrada de Guedes aportó peligro a los locales, pero unos imperiales David López y Mario Hermoso, que contaron con la ayuda de todo el equipo, consiguieron repeler todas las ocasiones que llegaron. Ni siquiera los cinco minutos de añadido concedidos por el colegiado fueron suficientes para cambiar un marcador permanente, aunque sí bastaron para que Javi López viese su segunda tarjeta amarilla y terminase el partido antes de tiempo.
El partido se zanjó con un empate que no termina de gustar a ninguno de los dos conjuntos. Al Valencia, por prorrogar su mala racha como locales y no conseguir todavía dar el salto a posiciones europeas; y al Espanyol, por ofrecer un juego que todavía está lejos de parecerse al de principio de temporada, manteniendo los problemas en transición defensiva y sus dificultades en conectar con los delanteros. El conjunto de Rubi podrá valorar positivamente este empate si consigue vencer sus dos próximos partidos como local ante Huesca y Valladolid; por su parte, el Valencia visitará Butarque para verse las caras con un Leganés que no está demasiado lejos en la clasificación.
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| Fuente: @valenciacf |
LaLiga Santander-Jornada 24
| Valencia | 0 |
|---|---|
| Espanyol | 0 |
Ficha técnica
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Valencia: Neto; Wass, Garay, Roncaglia, Gayà; Ferran Torres (Santi Mina, min. 76), Parejo, Coquelin (Kondogbia, min. 68), Cheryshev; Sobrino (Guedes, min. 57), Gameiro.
Espanyol: Diego López; Rosales, David López, Hermoso, Javi López; Marc Roca, Darder (Puado, min. 64), Granero; Melendo, Borja Iglesias (Facundo Ferreyra, min. 78), Wu Lei (Alfa Semedo, min. 71). Árbitro: Ricardo De Burgos Bengoetxea (Comité vasco). Amonestó a Coquelin y Roncaglia por el Valencia, a Granero y Marc Roca por el Espanyol, y expulsó a Javi López por doble amonestación. Incidencias: partido correspondiente a la vigésimocuarta jornada de la Liga Santander, disputado en el estadio de Mestalla ante 39.564 espectadores. |
Los periquitos iniciaron el partido con la voluntad de recuperar ese Espanyol de las primeras jornadas: Marc Roca, incrustado entre centrales, ayudó a mantener la posesión y progresar en el campo, gracias a un Darder excelso en el control y a los retazos de calidad de Óscar Melendo. Sin embargo, la posesión periquita resultó ser estéril, pues no logró conectar con Borja Iglesias y Wu Lei, voluntariosos, pero frenados por una sólida línea defensiva che.
Los locales, en cambio, sin gozar de tanto balón amenazaron mucho más la portería defendida por Diego López. La primera la tuvieron en el 28, cuando Gameiro recibió un pase en profundidad de Ferran y, cual escopeta cargada, disparó un balazo que hizo tambalear al poste.
Y es que el Espanyol adoleció de lo que lleva sufriendo toda la temporada: sus transiciones defensivas conceden demasiados espacios a sus rivales. Algo que aprovechó el Valencia que, capitaneado por Dani Parejo, recargó las bandas a través de Gayá y Ferran ante los laterales periquitos, que sufrieron considerablemente.
El resultado se mantuvo invariable durante todo el partido, pero no podemos decir lo mismo del juego visto durante las dos partes. A diferencia de la primera mitad, donde vimos un Espanyol que quería mandar a través del balón, tras el descanso los de Marcelino cogieron el toro por los cuernos y poco a poco fueron ganando terreno a los blanquiazules, hasta convertirlo en un monopolio che.
Lo que en las primera parte eran contraataques tras las pérdidas periquitas, en la segunda se transformó en rápidos y constantes ataques lanzados por las bandas. Múltiples fueron las ocasiones del Valencia para marcar: Parejo estuvo a punto de hacerlo en el 62, y lo habría conseguido si no hubiese sido por un Diego López atentísimo; más tarde lo intentó Gameiro, con una chilena, y Roncaglia, de cabeza tras una falta favorable.
Viendo el panorama, Rubi renunció a la posesión (y prácticamente a la victoria), retirando a Darder y Wu Lei para dar entrada a Puado y Alfa Semedo. Fue el guineano el que más presencia tuvo en el campo, aportando oxígeno y lanzando más de un contraataque. Uno de estos terminaría en el único chute a puerta del Espanyol, realizado precisamente por Puado, que despejó Neto con una gran estirada.
Los minutos pasaban y la ofensiva valencianista seguía su curso, pero sin acierto. La entrada de Guedes aportó peligro a los locales, pero unos imperiales David López y Mario Hermoso, que contaron con la ayuda de todo el equipo, consiguieron repeler todas las ocasiones que llegaron. Ni siquiera los cinco minutos de añadido concedidos por el colegiado fueron suficientes para cambiar un marcador permanente, aunque sí bastaron para que Javi López viese su segunda tarjeta amarilla y terminase el partido antes de tiempo.
El partido se zanjó con un empate que no termina de gustar a ninguno de los dos conjuntos. Al Valencia, por prorrogar su mala racha como locales y no conseguir todavía dar el salto a posiciones europeas; y al Espanyol, por ofrecer un juego que todavía está lejos de parecerse al de principio de temporada, manteniendo los problemas en transición defensiva y sus dificultades en conectar con los delanteros. El conjunto de Rubi podrá valorar positivamente este empate si consigue vencer sus dos próximos partidos como local ante Huesca y Valladolid; por su parte, el Valencia visitará Butarque para verse las caras con un Leganés que no está demasiado lejos en la clasificación.
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