Celta 0-1 Real Betis: El Betis gana en Balaídos y sigue luchando por Europa
La entrada de Tello fue clave y cambió el partido a favor de los sevillanos
Se estrenaba Fran Escribá en el banquillo del Celta de Vigo tras la destitución de Miguel Cardoso. La llegada del técnico valenciano traía consigo nuevos aires, de esperanza, a la ciudad gallega.
Volvía Escribá a la defensa de 4, defenestrada por Cardoso que prefería jugar con 5, y a poner un doble pivote para liberar más a los 3 mediapuntas que había alineado: Boudebouz, Boufal, Brais Méndez.
La idea, a priori, era atractiva, pero cuando entregas el balón al rival y sacrificas en labores defensivas a este tipo de jugadores tienes un serio problema.
Durante los primeros 45 minutos los de Setién, con su característico estilo, dominaron la posesión del balón aunque con poca verticalidad y ritmo; algo también característico valga la redundancia. El Betis asumía muchos riesgos en la salida de balón, y esto les pudo costar muy caro. Por dos veces, el Celta robó cerca del área y pudo adelantarse en el marcador. Maxi Gómez tuvo la más clara.
Por su parte, el Betis encontraba constantes líneas de pase para que Canales y Lo Celso recibieran con espacio y metros para correr. Sin embargo, el ritmo ramplón y la poca verticalidad privaban a los heliopolitanos de tener más ocasiones de las que en realidad tuvieron. Tan solo un disparo lejano de Jesé acabó entre los tres palos en la primera mitad.
La segunda parte comenzaba igual que terminó la primera, el Betis dominando y el Celta replegado atrás esperando salir a la contra.
El punto de inflexión en el encuentro llegó en el minuto 49, Francis se lesionó el tobillo tras un choque con Brais y era sustituido por Tello. A partir de este momento el partido fue un monólogo del Betis.
Con el catalán en el carril izquierdo el Betis ganó verticalidad y desborde, demostrándose de nuevo que tiene que ser titular indiscutiblemente. Tuvo el Betis la más clara en sus botas, una jugada trenzada entre Tello y Guardado terminaba en un mano a mano y la pelota saliendo fuera por muy poco.
Los sevillanos lo intentaban sin fortuna, tenían ocasiones de todos los colores y todas acababan desbaratadas de la misma forma; despejadas por la defensa olívica. En la segunda mitad, el Celta ni siquiera se acercaba a la portería custodiada por Pau López. Era un milagro que luciera el empate en el marcador.
Al final el fútbol hizo justicia y el Betis se adelantó en el marcador. A falta de 10 minutos Jesé mandaba el esférico al fondo de las mallas tras un rechace de Rubén a tiro de Tello. Hubo suspense antes de que se validara el gol, Estrada Fernández revisó el VAR por un posible fuera de juego del carrilero bético. No lo hubo y por consecuente, el tanto subió al luminoso.
En los últimos 15 minutos tras el gol no pasó nada reseñable. El Betis supo controlar bien el tempo del partido y el Celta era incapaz de finalizar una jugada entre los tres palos.
Esta victoria vuelve a dar crédito a Setién antes de enfrentarse al Barça, y devuelve al Betis a puestos europeos. El Celta sin embargo, sigue metido en una zona comprometida, marcando la salvación a la espera del resultado entre el Villarreal y el Levante
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| Foto: Real Betis |
LaLiga Santander-Jornada 27
| Celta | 0 |
|---|---|
| Betis | 1 |
Ficha técnica
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|---|
RC. Celta: Rubén; Hugo Mallo, Costas, Araujo, Juncá; Okay (Jensen, m. 88), Lobotka; Boudebouz (Sisto, m. 63), Brais Méndez, Boufal (Apeh, m. 84); y Maxi Gómez.
Real Betis: Pau López; Mandi, Bartra, Sidnei; Joaquín (Emerson, m. 90), William, Guardado, Canales, Lo Celso (Javi García, m. 88), Francis (Tello, m. 52); y Jesé. Gol: 0-1, m. 79: Jesé. Árbitro: Estrada Fernández (Comité Catalán): Amonestó a Okay, Maxi Gómez y Hugo Mallo. Incidencias: 18.005 espectadores en el estadio de Balaídos, con presencia de seguidores verdiblancos repartidos por todo el campo. |
Volvía Escribá a la defensa de 4, defenestrada por Cardoso que prefería jugar con 5, y a poner un doble pivote para liberar más a los 3 mediapuntas que había alineado: Boudebouz, Boufal, Brais Méndez.
La idea, a priori, era atractiva, pero cuando entregas el balón al rival y sacrificas en labores defensivas a este tipo de jugadores tienes un serio problema.
Durante los primeros 45 minutos los de Setién, con su característico estilo, dominaron la posesión del balón aunque con poca verticalidad y ritmo; algo también característico valga la redundancia. El Betis asumía muchos riesgos en la salida de balón, y esto les pudo costar muy caro. Por dos veces, el Celta robó cerca del área y pudo adelantarse en el marcador. Maxi Gómez tuvo la más clara.
Por su parte, el Betis encontraba constantes líneas de pase para que Canales y Lo Celso recibieran con espacio y metros para correr. Sin embargo, el ritmo ramplón y la poca verticalidad privaban a los heliopolitanos de tener más ocasiones de las que en realidad tuvieron. Tan solo un disparo lejano de Jesé acabó entre los tres palos en la primera mitad.
La segunda parte comenzaba igual que terminó la primera, el Betis dominando y el Celta replegado atrás esperando salir a la contra.
El punto de inflexión en el encuentro llegó en el minuto 49, Francis se lesionó el tobillo tras un choque con Brais y era sustituido por Tello. A partir de este momento el partido fue un monólogo del Betis.
Con el catalán en el carril izquierdo el Betis ganó verticalidad y desborde, demostrándose de nuevo que tiene que ser titular indiscutiblemente. Tuvo el Betis la más clara en sus botas, una jugada trenzada entre Tello y Guardado terminaba en un mano a mano y la pelota saliendo fuera por muy poco.
Los sevillanos lo intentaban sin fortuna, tenían ocasiones de todos los colores y todas acababan desbaratadas de la misma forma; despejadas por la defensa olívica. En la segunda mitad, el Celta ni siquiera se acercaba a la portería custodiada por Pau López. Era un milagro que luciera el empate en el marcador.
Al final el fútbol hizo justicia y el Betis se adelantó en el marcador. A falta de 10 minutos Jesé mandaba el esférico al fondo de las mallas tras un rechace de Rubén a tiro de Tello. Hubo suspense antes de que se validara el gol, Estrada Fernández revisó el VAR por un posible fuera de juego del carrilero bético. No lo hubo y por consecuente, el tanto subió al luminoso.
En los últimos 15 minutos tras el gol no pasó nada reseñable. El Betis supo controlar bien el tempo del partido y el Celta era incapaz de finalizar una jugada entre los tres palos.
Esta victoria vuelve a dar crédito a Setién antes de enfrentarse al Barça, y devuelve al Betis a puestos europeos. El Celta sin embargo, sigue metido en una zona comprometida, marcando la salvación a la espera del resultado entre el Villarreal y el Levante
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