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Mallorca 2-1 Eibar: La suerte se alía con el Mallorca en su regreso a Primera División

El Mallorca vuelve a la máxima categoría por la puerta grande gracias a un gol en propia puerta

Foto: RCD Mallorca

LaLiga Santander-Jornada 1

Mallorca2
Eibar1
Ficha técnica
Mallorca: Reina; Joan Sastre (Xisco Campos, 86'), Valjent, Raíllo, Agbenyenu; Dani Rodríguez, Salva Sevilla, Baba, Febas (Trajkowski, 74'); Budimir (Álex Alegría, 65'), Lago Junior.

Eibar: Dmitrovic, Correa, Oliveira, Ramis, Tejero; Pedro León, Sergio Álvarez, Escalante, Orellana; Sergi Enrich, Kike García.

Goles: 1-0 Dani Rodríguez (4'), 1-1 Oliveira (57'), 2-1 Oliveira (pp) (75').

Árbitro: Mario Melero López (comité andaluz). Amonestó a Joan Sastre (14'), Sergio Álvarez (72'), Tejero (87'), Orellana (88'), Salva Sevilla (90+5').

Incidencias: Estadi de Son Moix (15.127 espectadores).
La temporada daba comienzo para los conjuntos de Mallorca y Guipuzkoa con el objetivo claro de asegurar la categoría para los primeros y con los segundos intentando seguir progresando en una categoría en la que ya empiezan a tener cierto recorrido.

Como si de un cuento se tratase y con algunos aficionados aún llegando a sus asientos llegó el primer gol del conjunto insular de la mano de Dani Rodríguez que, tras una carrera desde su propio campo se plantó ante la portería de Dmitrović para engañarlo en un mano a mano. El Mallorca parecía haber salido con las pilas bien cargadas ya que tras el gol del centrocampista gallego pudo llegar el segundo local de no haber sido porque Ante Budimir envió el balón a las nubes en boca de gol. El control del partido sería para los de Vicente Moreno durante la primera media hora mientras que el conjunto guipuzcuano solo pudo defenderse de las constantes acometidas bermellonas e intentar generar peligro con jugadas a balón parado aunque sin mucho acierto.

Ante este panorama, José Luis Mendilibar decidió mover ficha y hacer un cambio táctico y dio entrada a Edu Expósito por Escalante con una hora de juego aún por delante. El cambio pareció activar al equipo visitante o al menos a Fabián Orellana ya que de sus botas surgiría la acción más clara para los armeros en la primera parte tras una muy buena jugada personal dentro del área local. Tras esta jugada el Eibar consiguió empezar a dominar y encerrar a los mallorquines en su propio campo, haciendo que el único peligro que consiguiesen crear estos llegase tras errores al salir con el balón o con contras dirigidas por Salva Sevilla.

Ya en la segunda parte, los de Mendilibar siguieron imponiendo su juego hasta que en el minuto 57  Oliveira consiguió empatar el partido tras un rechace que remató al único hueco que había dejado Manolo Reina. A raíz del gol armero los ánimos visitantes aumentaron aún más y vieron que la victoria era más que posible por lo que aumentaron la intensidad en el ataque. Los insulares fueron conscientes de que su situación había cambiado y modificaron su esquema para explotar la espalda de la defensa vasca mediante balones largos, estrategia que pudo surgir efecto en el minuto 71 aunque Dani Rodríguez no logró rematar con certeza. Sin embargo, 5 minutos después la mala suerte se apoderaría de la defensa armera al despejar Oliveira un centro lateral al centro de la portería de su portero con una vaselina.

A partir de ese gol el partido se rompió y las llegadas se empezaron a suceder para ambos equipos junto a una subida de la tensión del partido generalizada. Encontronazos, codazos y sangre fueron la tónica hasta que el colegiado pitó el final del partido para alegría de la parroquia mallorquinista.

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