Dos son más que tres
¿Es mejor el Real Madrid de Zidane o el FC Barcelona de Guardiola?
Cuando el FC Barcelona con Pep Guardiola a la cabeza, ganó el sextete, todo estaba hecho. El combinado blaugrana era el mejor equipo de la historia del fútbol, no había discusión, nadie podría igualar la hazaña conseguida por los culés. No habría ningún equipo igual, ni siquiera en la PlayStation. Sinonimo de éxito, definición de victoria, de buen fútbol. El FC Barcelona era, el amo y señor del balompié.
Y digo era, porque ya no lo es, pese a que algunos le sigan considerando el mejor equipo del mundo lo cierto es que la realidad es muy distinta. El conjunto catalán ya no es ni la sombra de lo que era. No lo es porque ante sí tiene una imagen que le tapa, que no le deja brillar, un club que en estos momentos le está superando, sin Guardiola y con Guardiola, con Messi, y sin Messi. El Real Madrid es una sombra alargada, blanca, no negra, pero más densa que cualquier otra. Una que está dejando en un segundo plano a aquel combinado que consiguió el triplete, el sextete y las 26 Copas del Rey. No hay nada igual, si antes era el Barcelona el que parecía único, ahora ese adjetivo le pertenece al Madrid.
Tras ganar la duodécima, lo que ha significado conquistar de forma consecutiva la Champions League en dos ocasiones, el Real Madrid se ha convertido sin duda en el mejor equipo del mundo. Si alguna vez dejó de serlo, ahora vuelve al trono, al lugar que le pertenece, al asiento que nunca debió dejar. Por historia y por títulos, el combinado blanco nunca ha abdicado de su trono, siempre ha sido el mejor equipo de la historia. El único que tiene 12 Champions y 33 Ligas. Una grandeza cosechada titulo tras titulo, logro tras logro. El Real Madrid no es un equipo, es el equipo, ese escudo que todo el mundo quiere llevar en la camiseta pero que muy pocos llegan a besar y tocar. Ese nombre y ese emblema, tienen algo, enamora a los jugadores. Trasmite éxito, valores, aunque Piqué no los vea. Madrid, como Andalucía, tiene un color especial. El blanco es singular, es el tono de la victoria, del esfuerzo, del orgullo y de la fuerza. Real Madrid, sinónimo de éxito, de títulos, quizá por eso todos quieren vestir de blanco, porque saben que asi ganarán mucho y perderán poco, no solo billetes, sino también partidos.
El Madrid es eterno, aunque siempre lo ha sido, el combinado blanco no es solo historia del futbol, sino tambien leyenda. No sólo escribirán páginas hablando de esta gesta, sino también libros, tomos. Dos son más que tres. Un doblete es más que un triplete. O al menos en este caso.
@Jbrugos8
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| Foto: Marca |
Y digo era, porque ya no lo es, pese a que algunos le sigan considerando el mejor equipo del mundo lo cierto es que la realidad es muy distinta. El conjunto catalán ya no es ni la sombra de lo que era. No lo es porque ante sí tiene una imagen que le tapa, que no le deja brillar, un club que en estos momentos le está superando, sin Guardiola y con Guardiola, con Messi, y sin Messi. El Real Madrid es una sombra alargada, blanca, no negra, pero más densa que cualquier otra. Una que está dejando en un segundo plano a aquel combinado que consiguió el triplete, el sextete y las 26 Copas del Rey. No hay nada igual, si antes era el Barcelona el que parecía único, ahora ese adjetivo le pertenece al Madrid.
Tras ganar la duodécima, lo que ha significado conquistar de forma consecutiva la Champions League en dos ocasiones, el Real Madrid se ha convertido sin duda en el mejor equipo del mundo. Si alguna vez dejó de serlo, ahora vuelve al trono, al lugar que le pertenece, al asiento que nunca debió dejar. Por historia y por títulos, el combinado blanco nunca ha abdicado de su trono, siempre ha sido el mejor equipo de la historia. El único que tiene 12 Champions y 33 Ligas. Una grandeza cosechada titulo tras titulo, logro tras logro. El Real Madrid no es un equipo, es el equipo, ese escudo que todo el mundo quiere llevar en la camiseta pero que muy pocos llegan a besar y tocar. Ese nombre y ese emblema, tienen algo, enamora a los jugadores. Trasmite éxito, valores, aunque Piqué no los vea. Madrid, como Andalucía, tiene un color especial. El blanco es singular, es el tono de la victoria, del esfuerzo, del orgullo y de la fuerza. Real Madrid, sinónimo de éxito, de títulos, quizá por eso todos quieren vestir de blanco, porque saben que asi ganarán mucho y perderán poco, no solo billetes, sino también partidos.
El Madrid es eterno, aunque siempre lo ha sido, el combinado blanco no es solo historia del futbol, sino tambien leyenda. No sólo escribirán páginas hablando de esta gesta, sino también libros, tomos. Dos son más que tres. Un doblete es más que un triplete. O al menos en este caso.
@Jbrugos8