Real Oviedo 3-1 Numancia: El Oviedo más auténtico anula al Numancia
El conjunto carbayón juega su mejor encuentro en lo que va de temporada y anula por completo a los sorianos. Los goles de Carlos Hernández, Calvo en propia puerta y Linares dejan los 3 puntos en el Carlos Tartiere
Como si de Doctor Jekyll y Mr. Hyde se tratara. El Real Oviedo tiene dos personalidades, y en estos dos últimos años nos ha dejado entrever que en casa es un equipo muy a tener en cuenta, mientras que donde se muestra inofensivo es a domicilio.
En el caso de hoy vimos la cara alegre de la moneda, la considerada real, la que habría que tratar de trasladar a los encuentros disputados lejos del Tartiere. Si Anquela da con la tecla en ese sentido, tendremos Real Oviedo para rato.
Desde el pitido inicial vimos a los azules siendo fiel reflejo de su entrenador, con un carácter intenso y con las ideas claras, combinando y triangulando con poco más de dos o tres toques. Era de esperar que con esta actitud llegasen pronto las ocasiones. Así fue, Aarón tuvo la primera tras una gran jugada en banda izquierda con Mossa, Linares y Saúl de protagonistas, el asturiano dejó un balón perfecto dentro del área que Linares dejaba de cara para Aarón. Su disparo se marchó ligeramente desviado.
No mucho después, a la salida de un córner Saúl cedía el balón a Johanesson, que regalaba a los azules un gol en forma de asistencia que remataria Carlos Hdez a gol. Si sigue así, el islandés puede conseguir un billete hacia el mundial.
Aún así, de nuevo mala suerte para los carbayones. Poco más podría hacer Aarón Ñíguez, ya que justo antes de cumplirse la primera media hora caia lesionado, obligando a Anquela a dar entrada a Yeboah. Si el jienense monta un circo, le crecen los enanos.
Parece que esta situación descolocó un poco a los jugadores azules, dando ánimos al Numancia. Los sorianos aprovecharon su única ocasión hasta el momento a la salida de un córner, falló Alfonso y el balón para dentro. Cabe destacar que Juan Carlos, el portero titular, se quedó en el banquillo por sus continuos fallos.
Poco más se puede destacar del primer tiempo, salvo una última jugada de nuevo por banda izquierda de Saúl que pone un pase de la muerte excelente al que no llegan ni Linares ni Johanesson a rematar. Pitido y para la caseta.
La tónica seguiria siendo la misma, con un Oviedo mandón y un Numancia replegado pero que era incapaz de ganar los duelos individuales y las pelotas divididas. En esas avisó de nuevo el Oviedo con un gran centro de Saúl que Yeboah remataba a bocajarro. Gol anulado por fuera de juego. El ghanés comenzó a aparecer en el encuentro, dando situaciones favorables a sus compañeros con diversos apoyos y desmarques. Gran noticia para los de la capital del Principado.
Seguía insistiendo el Oviedo, y en esa insistencia apareció la ocasión. De nuevo Saúl desde la banda enviaba el balón a la frontal para que Johanesson pegara un zapatazo que se estrellaba en el travesaño. Calvo trataría de ceder el rechace a su portero, pero la falta de entendimiento provocaba el segundo gol astur.
Sin ceder ni un metro, el Real Oviedo siguió mandando en el encuentro, y si antes hablabamos de Yeboah, fue el ghanés quien tras una gran jugada provocaba la falta que precedia al tercer y definitivo gol. Un caramelo salido del guante de Saúl acababa en un gran testarazo de Linares a las mallas. Gol y sentencia.
Poco más pudo hacer el Numancia, que solo apareció tras la entrada de Guillermo, quién provocó un par de ocasiones de peligro, siendo la más clara un disparo al travesaño. Alfonso evitaria un mano a mano y un remate a bocajarro, dejando el marcador tal y como lo cerró Linares.
Gran encuentro de los asturianos, que no dejaron al Numancia exponer las armas que han llevado al conjunto soriano a estar en una posición privilegiada en la tabla. Ahora es cuestión que la cara alegre de la moneda se mantenga y no se de la vuelta cuando los azules jueguen de visitante.
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| Foto. Juanjo Castro |
LaLiga 1|2|3-Jornada 16
| R.Oviedo | 3 |
|---|---|
| Numancia | 1 |
Ficha técnica
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R.Oviedo: Alfonso Herrero; Johanesson (Cotugno 81'), Carlos H, Forlín, Christian Fdez, Mossa; Folch, Rocha; Aarón Ñíguez (Yeboah 29'), Saúl Berjón (Mariga 87'), Linares.
Numancia: Aitor Fdz; Ripa, Elgezabal (Larrea 67'), Calvo, Etxebarria; Iñigo, Escassi, Mateu, Valcarce (Guillermo 71') Higinio (Dani Nieto 79') y Del Moral. Goles: 1-0, m. 15: Carlos H. 1-1, m.31: Higinio. 2-1, m. 56: Dani Calvo p.p. 3-1, m.66: Linares. Árbitro: Prieto Iglesias, del comité navarro. Amonestó a Christian Fdez (35') a Folch (49') y a Johanesson (70') por parte del Oviedo, y a Elguezabal (51') y Ripa (85') por parte del Numancia. Incidencias: Encuentro correspondiente a la jornada 16 del campeonato nacional de LaLiga 123 en el estadio Carlos Tartiere de Oviedo, ante la presencia de 13.000 espectadores. |
En el caso de hoy vimos la cara alegre de la moneda, la considerada real, la que habría que tratar de trasladar a los encuentros disputados lejos del Tartiere. Si Anquela da con la tecla en ese sentido, tendremos Real Oviedo para rato.
Desde el pitido inicial vimos a los azules siendo fiel reflejo de su entrenador, con un carácter intenso y con las ideas claras, combinando y triangulando con poco más de dos o tres toques. Era de esperar que con esta actitud llegasen pronto las ocasiones. Así fue, Aarón tuvo la primera tras una gran jugada en banda izquierda con Mossa, Linares y Saúl de protagonistas, el asturiano dejó un balón perfecto dentro del área que Linares dejaba de cara para Aarón. Su disparo se marchó ligeramente desviado.
No mucho después, a la salida de un córner Saúl cedía el balón a Johanesson, que regalaba a los azules un gol en forma de asistencia que remataria Carlos Hdez a gol. Si sigue así, el islandés puede conseguir un billete hacia el mundial.
Aún así, de nuevo mala suerte para los carbayones. Poco más podría hacer Aarón Ñíguez, ya que justo antes de cumplirse la primera media hora caia lesionado, obligando a Anquela a dar entrada a Yeboah. Si el jienense monta un circo, le crecen los enanos.
Parece que esta situación descolocó un poco a los jugadores azules, dando ánimos al Numancia. Los sorianos aprovecharon su única ocasión hasta el momento a la salida de un córner, falló Alfonso y el balón para dentro. Cabe destacar que Juan Carlos, el portero titular, se quedó en el banquillo por sus continuos fallos.
Poco más se puede destacar del primer tiempo, salvo una última jugada de nuevo por banda izquierda de Saúl que pone un pase de la muerte excelente al que no llegan ni Linares ni Johanesson a rematar. Pitido y para la caseta.
La tónica seguiria siendo la misma, con un Oviedo mandón y un Numancia replegado pero que era incapaz de ganar los duelos individuales y las pelotas divididas. En esas avisó de nuevo el Oviedo con un gran centro de Saúl que Yeboah remataba a bocajarro. Gol anulado por fuera de juego. El ghanés comenzó a aparecer en el encuentro, dando situaciones favorables a sus compañeros con diversos apoyos y desmarques. Gran noticia para los de la capital del Principado.
Seguía insistiendo el Oviedo, y en esa insistencia apareció la ocasión. De nuevo Saúl desde la banda enviaba el balón a la frontal para que Johanesson pegara un zapatazo que se estrellaba en el travesaño. Calvo trataría de ceder el rechace a su portero, pero la falta de entendimiento provocaba el segundo gol astur.
Sin ceder ni un metro, el Real Oviedo siguió mandando en el encuentro, y si antes hablabamos de Yeboah, fue el ghanés quien tras una gran jugada provocaba la falta que precedia al tercer y definitivo gol. Un caramelo salido del guante de Saúl acababa en un gran testarazo de Linares a las mallas. Gol y sentencia.
Poco más pudo hacer el Numancia, que solo apareció tras la entrada de Guillermo, quién provocó un par de ocasiones de peligro, siendo la más clara un disparo al travesaño. Alfonso evitaria un mano a mano y un remate a bocajarro, dejando el marcador tal y como lo cerró Linares.
Gran encuentro de los asturianos, que no dejaron al Numancia exponer las armas que han llevado al conjunto soriano a estar en una posición privilegiada en la tabla. Ahora es cuestión que la cara alegre de la moneda se mantenga y no se de la vuelta cuando los azules jueguen de visitante.
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