Málaga 1-0 Villarreal: Un Málaga resucitado
Los de Javi Calleja pierden tres puntos vitales para la pelea por Europa
El Villarreal visitó el estadio de La Rosaleda con la intención de sumar los tres puntos en el campo de un colista que puede contar los días que le quedan en la máxima categoría, pero al final vio como su afán fue baldío. Principalmente porque nunca supo como contrarrestar a un Málaga que, con casi todo perdido, salió con más ganas, con más fe en lograr el botín de la victoria, algo que al final consiguió.
Nunca mejor dicho, Domingo de Resurrección en la capital malagueña, donde los de José González sacaron adelante el compromiso y, al décimo partido, ganaron, o lo que es lo mismo, resucitaron.
Partido con poco reseñable en una primera mitad en la que apenas hubo oportunidades. Eso sí, en un choque con poco juego, fue el Málaga el que tuvo mejor actitud, sobre todo al principio, lo que llevó a tener la iniciativa y a obligar al Villarreal a defenderse.
Claro que poco a poco el equipo malaguista fue perdiendo la posesión de la pelota, y pasado el primer cuarto de hora del encuentro por fin llegó la primera aproximación con cierto peligro del submarino amarillo. Fue Fornals -ligeramente pitado en su vuelta a La Rosaleda- elque inició la jugada, cediendo el balón en la frontal a Sansone para un disparo franco, pero éste no pudo evitar pero la defensa local despejara.
Aunque el partido se equilibró sin pasar muchas cosas, los locales no dejaron de intentarlo, pero si terminar de encontrar la meta rival. Eso sí, dio un susto en una jugada de Rolan, que acabó por disparar saliendo la pelota por encima del travesaño. Y el mismo protagonista fue el artífice de la acción que cambió el curso de los acontecimiento. Porque Rolan fue quien se metió hasta la cocina, y Asenjo lo derribó ocasionando la pena máxima. El 'Chory', desde los once metros, no falló, y consiguió el primer tanto para el Málaga, que no marcaba desde la jornada 25 en el estadio de San Mamés.
En la segunda parte, más de lo mismo, es decir un Málaga más ambicioso, con una buena presión alta, poniendo en serias dificultades al Villarreal a la hora de mover la pelota, y estando siempre presto a salir con rapidez en busca de Asenjo.
No le hizo falta dominar mucho para tener el control del partido, minimizando riesgos atrás y apretando en el centro del campo, donde esta vez el Villarreal se vio superado. La entrada al campo de Ünal, en el ataque, y de Raba, para fortalecer el centro del campo, dieron el fruto apetecido, y el Málaga se puede decir que con menos apuros de los esperados, supo como llegar a buen puerto con la renta adquirida en el primer periodo.
Es más, si hubo alguien que, de verdad, lo siguió intentado, fue el Málaga, con un Rolan muy batallador e incisivo, que casi siempre inquietaron la meta visitante.
Sólo al final, ya con el Villarreal volcado y el Málaga más pendiente de salvaguardar su ventaja, el equipo de Calleja pisó el área con cierta intención, eso sí, más con el corazón que con la cabeza, y con pocos argumentos para cambiar el desenlace de esta película.
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| Foto: Villarreal CF |
LaLiga Santander-Jornada 30
| Málaga | 1 |
|---|---|
| Villarreal | 0 |
Ficha técnica
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Málaga: Roberto; Rosales, Luis Hernández, I. Miquel, M. Torres; Iturra, Lacen (Adrián), S. Isaac (Bueno), Chory (Lestienne); D. Rolan, En-Nesyri.
Villarreal: Asenjo; Jaume Costa, Bonera, Álvaro, Mario; Soriano, Rodrigo, Samu Castillejo (Raba); Fornals; Bacca (Enes Ünal), Sansone (R. Martínez) Goles: 1-0 p. Chory (min.36) Árbitro: Álvarez Izquierdo amonestó por parte del Málaga a Lacen, M. Torres y a los visitantes Jaume Costa, Asenjo, Soriano Incidencias: partido correspondiente a la jornada 30 disputado en el Estadio de La Rosaleda. |
Nunca mejor dicho, Domingo de Resurrección en la capital malagueña, donde los de José González sacaron adelante el compromiso y, al décimo partido, ganaron, o lo que es lo mismo, resucitaron.
Partido con poco reseñable en una primera mitad en la que apenas hubo oportunidades. Eso sí, en un choque con poco juego, fue el Málaga el que tuvo mejor actitud, sobre todo al principio, lo que llevó a tener la iniciativa y a obligar al Villarreal a defenderse.
Claro que poco a poco el equipo malaguista fue perdiendo la posesión de la pelota, y pasado el primer cuarto de hora del encuentro por fin llegó la primera aproximación con cierto peligro del submarino amarillo. Fue Fornals -ligeramente pitado en su vuelta a La Rosaleda- elque inició la jugada, cediendo el balón en la frontal a Sansone para un disparo franco, pero éste no pudo evitar pero la defensa local despejara.
Aunque el partido se equilibró sin pasar muchas cosas, los locales no dejaron de intentarlo, pero si terminar de encontrar la meta rival. Eso sí, dio un susto en una jugada de Rolan, que acabó por disparar saliendo la pelota por encima del travesaño. Y el mismo protagonista fue el artífice de la acción que cambió el curso de los acontecimiento. Porque Rolan fue quien se metió hasta la cocina, y Asenjo lo derribó ocasionando la pena máxima. El 'Chory', desde los once metros, no falló, y consiguió el primer tanto para el Málaga, que no marcaba desde la jornada 25 en el estadio de San Mamés.
En la segunda parte, más de lo mismo, es decir un Málaga más ambicioso, con una buena presión alta, poniendo en serias dificultades al Villarreal a la hora de mover la pelota, y estando siempre presto a salir con rapidez en busca de Asenjo.
No le hizo falta dominar mucho para tener el control del partido, minimizando riesgos atrás y apretando en el centro del campo, donde esta vez el Villarreal se vio superado. La entrada al campo de Ünal, en el ataque, y de Raba, para fortalecer el centro del campo, dieron el fruto apetecido, y el Málaga se puede decir que con menos apuros de los esperados, supo como llegar a buen puerto con la renta adquirida en el primer periodo.
Es más, si hubo alguien que, de verdad, lo siguió intentado, fue el Málaga, con un Rolan muy batallador e incisivo, que casi siempre inquietaron la meta visitante.
Sólo al final, ya con el Villarreal volcado y el Málaga más pendiente de salvaguardar su ventaja, el equipo de Calleja pisó el área con cierta intención, eso sí, más con el corazón que con la cabeza, y con pocos argumentos para cambiar el desenlace de esta película.