Osasuna 0-1 Tenerife: Un cañonazo de Acosta tumba El Sadar
El solitario gol del hondureño Bryan Acosta da la victoria al equipo de Joseba Etxebarría que sueña con el play-off
El partido dominical en el estadio de El Sadar era, a priori, un gran choque entre dos conjuntos históricos y con considerables posibilidades de acceder a los puestos que dan derecho a ascender a la máxima categoría del fútbol español. El conjunto blanquiazul acudía a Pamplona con una buena racha en los últimos partidos desde que Joseba Etxebarría cogiese las riendas del once isleño sumando cinco victorias en sus últimos siete encuentros.
Por otra parte, los navarros se citaban ante los blanquiazules atesorando mejor carta de presentación que resultados cosechados ya que la trayectoria de los rojillos ha sido muy desigual desde inicios de año.
Los primeros compases del encuentro comenzarían con buena presión por parte de los hombres de Etxebarría al marcaje uno contra uno sobre el hombre con balón cuando Osasuna manejaba el partido. El primer remate del Tenerife se produce en una falta lateral que no puede conectar el central Carlos Ruiz en el minuto tres de partido cuando el balón venía centrado en el segundo palo por el compañero de la zaga, Aveldaño.
Ante el arreón inicial y el juego por dentro de Milla y Alberto, el Osasuna intenta desperezarse con balones a las espaldas de los centrales blanquiazules. El primer remate local tiene el sello de Quique que envía el balón desviado por encima de la meta de Dani Hernández y los navarros imprimen velocidad en las bandas, predominantemente en la derecha.
Las ocasiones locales se suceden con los detalles de calidad de Borja Lasso, el 19 rojillo mejora notablemente la capacidad ofensiva de los suyos. Al llegar el primer cuarto de hora, Rober Ibáñez tiene la posibilidad de anotar el primero desde el borde del área pero ve su remate tapado por Carlos Ruiz. En la siguiente jugada, el portero blanquiazul salva el primer disparo claro de los locales en las botas de Fran Mérida.
Desde este momento, el encuentro se ve diluido en minutos de tedioso equilibrio sin inquietar en exceso a ninguna de las dos zagas. Tanto es así que a la media hora de encuentro todavía no se había producido ningún remate entre los tres palos por parte del Tenerife y las aproximaciones locales habían sido muy tímidas y sin ser manifiestas de gol.
En el minuto 39, Milla prueba suerte desde fuera del área pero el balón llega muerto al portero de Osasuna por el rebote en un propio compañero de la zaga. Responde directamente el equipo local con una muy buena jugada de combinación con toques de primera para centrar al punto de penalti que consigue salvar la defensa blanquiazul.
El primer tiempo finalizaría sin remates certeros por el bando de los blanquiazules y con una circulación lenta e imprecisa en tres cuartas partes del campo. Por su parte, Osasuna explota la jugada particular de los rojillos que consiste en balones por alto que no terminan de contactar con los arietes locales. Se llegaría al descanso con tablas.
Tras el paso por vestuarios, la tendencia de los primeros 45 minutos se modificaría gracias a un nombre propio en el equipo blanquiazul: Bryan Acosta. El hondureño intuía el peligro para el respetable de El Sadar con el gran remate del 8 ante el toque sutil de Longo. En el minuto 51 es cuando llega la primera ocasión entre los tres palos de los visitantes durante todo el encuentro.
Tres minutos más tarde precisamente el protagonista de la jugada anterior, Acosta sería el encargado de mover el marcador a favor de los suyos con un gran misil desde fuera del área con mucha potencia ante lo que nada podía hacer el guardameta local.
En los minutos venideros, Osasuna intenta solventar la situación en contra con numerosas ocasiones con peligro que inquietan a Dani Hernández por la claridad y cercanía de igualar el encuentro. A quince minutos del final, el Tenerife intenta mantener la solidez defensiva y se defiende ante las acometidas locales para salvar de cualquier forma posible el resultado positivo.
La victoria de los blanquiazules les mantiene en la undécima posición de la tabla a tres puntos de la zona de play-off y solo con un punto menos que el rival riojano que se mantiene dos puestos por encima. En el próximo compromiso, los isleños se enfrentarán en el feudo local ante el Sevilla B y el Osasuna viajará a Granada para medirse ante otro rival directo en la lucha por el ascenso.
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| Fuente: Navarra.com |
LaLiga 1|2|3-Jornada 33
| Osasuna | 0 |
|---|---|
| Tenerife | 1 |
Ficha técnica
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|---|
CA Osasuna: Sergio Herrera, Lillo, Oier Sanjurjo, Unai García y Javier Flaño (Xisco, m.56). Fran Mérida, Lucas Torró. Borja Lasso (Torres, m.82), Rober Ibáñez (Sebas Coris, m.39), Kike Barja y Quique González.
CD Tenerife: Dani Hernández, Pérez, Iñaki, Alberto, Acosta (Vitolo, m.82), Longo (Casadesús, m.87), Carlos Ruiz, Aveldaño, Luis Milla, Raúl Cámara y Mula (Tayron, m.68). Árbitro: Jorge Valdés Aller (castellano-leonés). Mostró tarjetas a los jugadores Lucas Torró (m.18), Longo (m.58), Luis Milla (m.66) Goles: 0-1, Acosta (m.54). Incidencias: partido de la jornada 33ª de la Liga123 en el estadio de El Sadar, ante 12.842 espectadores. |
Por otra parte, los navarros se citaban ante los blanquiazules atesorando mejor carta de presentación que resultados cosechados ya que la trayectoria de los rojillos ha sido muy desigual desde inicios de año.
Los primeros compases del encuentro comenzarían con buena presión por parte de los hombres de Etxebarría al marcaje uno contra uno sobre el hombre con balón cuando Osasuna manejaba el partido. El primer remate del Tenerife se produce en una falta lateral que no puede conectar el central Carlos Ruiz en el minuto tres de partido cuando el balón venía centrado en el segundo palo por el compañero de la zaga, Aveldaño.
Ante el arreón inicial y el juego por dentro de Milla y Alberto, el Osasuna intenta desperezarse con balones a las espaldas de los centrales blanquiazules. El primer remate local tiene el sello de Quique que envía el balón desviado por encima de la meta de Dani Hernández y los navarros imprimen velocidad en las bandas, predominantemente en la derecha.
Las ocasiones locales se suceden con los detalles de calidad de Borja Lasso, el 19 rojillo mejora notablemente la capacidad ofensiva de los suyos. Al llegar el primer cuarto de hora, Rober Ibáñez tiene la posibilidad de anotar el primero desde el borde del área pero ve su remate tapado por Carlos Ruiz. En la siguiente jugada, el portero blanquiazul salva el primer disparo claro de los locales en las botas de Fran Mérida.
Desde este momento, el encuentro se ve diluido en minutos de tedioso equilibrio sin inquietar en exceso a ninguna de las dos zagas. Tanto es así que a la media hora de encuentro todavía no se había producido ningún remate entre los tres palos por parte del Tenerife y las aproximaciones locales habían sido muy tímidas y sin ser manifiestas de gol.
En el minuto 39, Milla prueba suerte desde fuera del área pero el balón llega muerto al portero de Osasuna por el rebote en un propio compañero de la zaga. Responde directamente el equipo local con una muy buena jugada de combinación con toques de primera para centrar al punto de penalti que consigue salvar la defensa blanquiazul.
El primer tiempo finalizaría sin remates certeros por el bando de los blanquiazules y con una circulación lenta e imprecisa en tres cuartas partes del campo. Por su parte, Osasuna explota la jugada particular de los rojillos que consiste en balones por alto que no terminan de contactar con los arietes locales. Se llegaría al descanso con tablas.
Tras el paso por vestuarios, la tendencia de los primeros 45 minutos se modificaría gracias a un nombre propio en el equipo blanquiazul: Bryan Acosta. El hondureño intuía el peligro para el respetable de El Sadar con el gran remate del 8 ante el toque sutil de Longo. En el minuto 51 es cuando llega la primera ocasión entre los tres palos de los visitantes durante todo el encuentro.
Tres minutos más tarde precisamente el protagonista de la jugada anterior, Acosta sería el encargado de mover el marcador a favor de los suyos con un gran misil desde fuera del área con mucha potencia ante lo que nada podía hacer el guardameta local.
En los minutos venideros, Osasuna intenta solventar la situación en contra con numerosas ocasiones con peligro que inquietan a Dani Hernández por la claridad y cercanía de igualar el encuentro. A quince minutos del final, el Tenerife intenta mantener la solidez defensiva y se defiende ante las acometidas locales para salvar de cualquier forma posible el resultado positivo.
La victoria de los blanquiazules les mantiene en la undécima posición de la tabla a tres puntos de la zona de play-off y solo con un punto menos que el rival riojano que se mantiene dos puestos por encima. En el próximo compromiso, los isleños se enfrentarán en el feudo local ante el Sevilla B y el Osasuna viajará a Granada para medirse ante otro rival directo en la lucha por el ascenso.
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