Gallinari y Chandler dan la victoria a Denver ante Minnesota en un agónico final (103-105)
Los Wolves tuvieron hasta dos opciones para forzar la prórroga e incluso ganar el partido pero tanto Wiggins como LaVine fallaron
Otro partido que se les escapa a los de Thibodeau en los segundos finales. Los Nuggets a pesar de tener el partido controlado estuvieron a punto de tirar por la borda todo el buen trabajo realizado desde el segundo cuarto.
El primer cuarto fue claramente para unos inspirados Wolves que de la mano de un acertado Dieng y un inspirado Wiggins consiguieron alejarse en el marcador de los locales gracias sobre todo al parcial de 0-8 cuando el marcador marcaba 14-15. Tras una serie de canastas por parte de los dos equipos se llegó al final del primer cuarto con 22-31 favorable a los de Minnesota.
Pero en el segundo cuarto fue otra historia y los Nuggets salieron decididos a dar la vuelta al marcador, objetivo que consiguieron de la mano de un gran Nurkic consiguió un parcial de 13-0, dejando un igualado 37-37 en el electrónico. Tras conseguir el empate Denver, el partido se relajó y se llegó al descanso con 49-49 en el marcador.
Tras el descanso volvió a ocurrir lo mismo que en el anterior cuarto, unos primeros minutos igualados pero un parcial de 9-0 de los locales les dio una ventaja a los de Malone que supieron administrar hasta el final de este cuarto dejando en el marcador ocho puntos de ventaja a favor de los locales (81-73).
Se llegaba al último cuarto y los Nuggets buscaron desde el arranque cerrar el partido. Un espectacular Jokic se encargaba de cumplir ese objetivo hasta que llegó Towns, que había estado especialmente fallón pero se echó el equipo a la espalda y consiguió poner el empate a falta de tan solo un minuto. Fue en ese momento cuando apareció Gallinari, que con un reverso al estilo Irving conseguía dar ventaja de dos puntos a los locales. Thibodeau pedía tiempo muerto para pensar y posteriormente ejecutar una jugada en los 27 segundos que les restaban al partido. La consigna fue un aclarado a Wiggins para que este buscará la canasta a tabla fácil, pero los de Minnesota no contaron con Chandler, que con un tapón increíble evito la canasta del alero canadiense. Tras unos rebotes el balón llego a LaVine que se jugó un triple desde poco más de la línea del triple pero este se quedó corto y la victoria se quedó en casa.
En los Nuggets hay que destacar a un enorme Jokic (16p 11asist) y a los dos héroes del último minuto, Gallinari y Chandler, que acabaron con 18 y 17 puntos respectivamente.
En los Wolves, a Wiggins que fue de más a menos (25 puntos), a Towns que pese a no ser una gran noche consiguió un gran triple-doble y a un gran Ricky Rubio que a pesar de comenzar con bastantes errores fue creciendo con el transcurso del partido y acabó con 18 puntos, 8 rebotes y 7 asistencias.
@Diegodelmoral1
Otro partido que se les escapa a los de Thibodeau en los segundos finales. Los Nuggets a pesar de tener el partido controlado estuvieron a punto de tirar por la borda todo el buen trabajo realizado desde el segundo cuarto.
El primer cuarto fue claramente para unos inspirados Wolves que de la mano de un acertado Dieng y un inspirado Wiggins consiguieron alejarse en el marcador de los locales gracias sobre todo al parcial de 0-8 cuando el marcador marcaba 14-15. Tras una serie de canastas por parte de los dos equipos se llegó al final del primer cuarto con 22-31 favorable a los de Minnesota.
Pero en el segundo cuarto fue otra historia y los Nuggets salieron decididos a dar la vuelta al marcador, objetivo que consiguieron de la mano de un gran Nurkic consiguió un parcial de 13-0, dejando un igualado 37-37 en el electrónico. Tras conseguir el empate Denver, el partido se relajó y se llegó al descanso con 49-49 en el marcador.
Tras el descanso volvió a ocurrir lo mismo que en el anterior cuarto, unos primeros minutos igualados pero un parcial de 9-0 de los locales les dio una ventaja a los de Malone que supieron administrar hasta el final de este cuarto dejando en el marcador ocho puntos de ventaja a favor de los locales (81-73).
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| Chandler conduce la pelota ante la defensa de Dieng (@nuggets) |
Se llegaba al último cuarto y los Nuggets buscaron desde el arranque cerrar el partido. Un espectacular Jokic se encargaba de cumplir ese objetivo hasta que llegó Towns, que había estado especialmente fallón pero se echó el equipo a la espalda y consiguió poner el empate a falta de tan solo un minuto. Fue en ese momento cuando apareció Gallinari, que con un reverso al estilo Irving conseguía dar ventaja de dos puntos a los locales. Thibodeau pedía tiempo muerto para pensar y posteriormente ejecutar una jugada en los 27 segundos que les restaban al partido. La consigna fue un aclarado a Wiggins para que este buscará la canasta a tabla fácil, pero los de Minnesota no contaron con Chandler, que con un tapón increíble evito la canasta del alero canadiense. Tras unos rebotes el balón llego a LaVine que se jugó un triple desde poco más de la línea del triple pero este se quedó corto y la victoria se quedó en casa.
En los Nuggets hay que destacar a un enorme Jokic (16p 11asist) y a los dos héroes del último minuto, Gallinari y Chandler, que acabaron con 18 y 17 puntos respectivamente.
En los Wolves, a Wiggins que fue de más a menos (25 puntos), a Towns que pese a no ser una gran noche consiguió un gran triple-doble y a un gran Ricky Rubio que a pesar de comenzar con bastantes errores fue creciendo con el transcurso del partido y acabó con 18 puntos, 8 rebotes y 7 asistencias.
@Diegodelmoral1