RC Deportivo 2-0 Málaga CF: El Málaga vuelve a la realidad
Los goles de Joselu y Mosquera acaban con un Málaga ramplón que no se pareció en nada al partido contra el Barcelona
Míchel y sus jugadores venían de la semana fantástica, no la de El Corte Inglés, sino la de alejarse de los puestos de descenso y transmitir una sensación de alivio a sus seguidores. Fueron dos triunfos especialmente importantes en cuestión de siete días: el primero contra el Sporting y el segundo ese partido que los que acudieron a La Rosaleda el pasado sábado contarán a sus nietos en unos años: "Yo vi como mi equipo ganó a una de las mejores plantillas del mundo del 2017...".
Sin embargo, siete días después, el Málaga aterrizó de nuevo en la pista que lleva toda la temporada, es decir, la de partidos con poco juego y menos ocasiones. La visita a A Coruña no será muy recordada por los jugadores blanquiazules, a no ser que se tomaran alguna tapa de pulpo gallego. Porque aunque salió con más ganas que su rival, los primeros veinte minutos pasaron lentos y tediosos para técnicos y espectadores. No pasó nada y claro, uno no podía evitar pensar que estaría mucho mejor en ese bar cercano con una cerveza en la mano y contando cómo ha ido esta semana de vacaciones. Cierto es que los pupilos de Míchel parecían tener controlada la situación, más que nada porque tampoco el Deportivo ponía mucho entusiasmo en buscar la portería defendida por Kameni.
La primera ocasión llegó tras un festival de tarjetas amarillas sacadas del bolsillo de Undiano Mallenco. Le llegó la pelota a Carles Gil y remató según le venía. Atrapó Kameni y la mañana se animaba poco a poco. Juankar respondió por la banda izquierda pero su remate al primer palo fue directo a las manos de Lux. Y de esta manera se llegó al descanso, con una igualdad que se vio reflejada justamente en el marcador de Riazor.
Y dos minutos después del saque de centro, llegó el primer gol de los gallegos. Centro medido de Luisinho desde la derecha y cabezazo inapelable Luis Hernández al fondo de la red. Así que el Málaga estaba otra vez como hace dos semanas, dando las gracias a los equipos de abajo cada jornada. Y es que los jugadores de Míchel acusaron aún más si cabe el gol de Luis Hernández. Más posesión, de acuerdo, pero cero llegadas al área rival. La entrada de Keko y Jony puso algo más de electricidad al encuentro, pero ni por esas ninguna persona que se encontraba viendo el partido daba alguna oportunidad de empate para el Málaga. Y en el minuto 67 el Málaga ya firmó su rendición con el segundo gol del Deportivo, obra de Mosquera.
Más allá de un trallazo de Camacho al larguero a diez minutos del final, no se observó mucho más en Riazor. Victoria para Pepe Mel y sus chicos, que le alejan de las tres últimas plazas de la clasificación y el Málaga en tierra de nadie, como todo el año, como esa pista de aterrizaje donde no hay nada a su alrededor, a excepción de una tranquilidad y un sosiego que ni en una isla desierta aleja de la civilización.
@Marioodjm
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| Sandro pugna por un balón con Arribas (Foto Málaga CF) |
LaLiga Santander-Jornada 32
| Deportivo | 2 |
|---|---|
| Málaga | 0 |
Ficha técnica
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RC Deportivo: Lux; Juanfran, Arribas, Sidnei, Luisinho; Guilherme, Borges; Bruno Gama (Mosquera, min.63), Carles Gil, Kakuta (Ola John, min.82); Joselu (Andone, min.59).
Málaga CF: Kameni; Rosales, Llorente, Luis Hernández (Jony, min.59), Mikel; Camacho, Recio (Charles, min.70); Chory Castro (Keko, min.59), Fornals, Juankar; Sandro. Goles: 1-0: Joselu (min.47). 2-0: Mosquera (min.67). Árbitro: Undiano Mallenco. Amonestó con tarjeta amarilla a Guilherme, Arribas y Carles Gil en el Dépor y a Recio, Luis Hernández, Keko y Camacho en el Málaga. Incidencias: Riazor (20300 personas). En el descanso, el club deportivista le rindió un emotivo homenaje a Mauro Silva. |
Sin embargo, siete días después, el Málaga aterrizó de nuevo en la pista que lleva toda la temporada, es decir, la de partidos con poco juego y menos ocasiones. La visita a A Coruña no será muy recordada por los jugadores blanquiazules, a no ser que se tomaran alguna tapa de pulpo gallego. Porque aunque salió con más ganas que su rival, los primeros veinte minutos pasaron lentos y tediosos para técnicos y espectadores. No pasó nada y claro, uno no podía evitar pensar que estaría mucho mejor en ese bar cercano con una cerveza en la mano y contando cómo ha ido esta semana de vacaciones. Cierto es que los pupilos de Míchel parecían tener controlada la situación, más que nada porque tampoco el Deportivo ponía mucho entusiasmo en buscar la portería defendida por Kameni.
La primera ocasión llegó tras un festival de tarjetas amarillas sacadas del bolsillo de Undiano Mallenco. Le llegó la pelota a Carles Gil y remató según le venía. Atrapó Kameni y la mañana se animaba poco a poco. Juankar respondió por la banda izquierda pero su remate al primer palo fue directo a las manos de Lux. Y de esta manera se llegó al descanso, con una igualdad que se vio reflejada justamente en el marcador de Riazor.
Y dos minutos después del saque de centro, llegó el primer gol de los gallegos. Centro medido de Luisinho desde la derecha y cabezazo inapelable Luis Hernández al fondo de la red. Así que el Málaga estaba otra vez como hace dos semanas, dando las gracias a los equipos de abajo cada jornada. Y es que los jugadores de Míchel acusaron aún más si cabe el gol de Luis Hernández. Más posesión, de acuerdo, pero cero llegadas al área rival. La entrada de Keko y Jony puso algo más de electricidad al encuentro, pero ni por esas ninguna persona que se encontraba viendo el partido daba alguna oportunidad de empate para el Málaga. Y en el minuto 67 el Málaga ya firmó su rendición con el segundo gol del Deportivo, obra de Mosquera.
Más allá de un trallazo de Camacho al larguero a diez minutos del final, no se observó mucho más en Riazor. Victoria para Pepe Mel y sus chicos, que le alejan de las tres últimas plazas de la clasificación y el Málaga en tierra de nadie, como todo el año, como esa pista de aterrizaje donde no hay nada a su alrededor, a excepción de una tranquilidad y un sosiego que ni en una isla desierta aleja de la civilización.
@Marioodjm